Metro Detroit, MI – En un esfuerzo por reducir los accidentes causados por la conducción distraída, las autoridades de Michigan han relanzado Operation Ghost Rider, una iniciativa que busca identificar y sancionar a los conductores que no prestan atención a la carretera.
El programa, que comenzó en 2017, emplea vehículos policiales sin identificación para detectar infractores y alertar a unidades marcadas cercanas, permitiendo una intervención rápida. Según datos recientes, en 2023 se registraron más de 15,000 accidentes relacionados con la conducción distraída en el estado, resultando en 59 muertes y casi 6,000 heridos.
Las autoridades han enfatizado que la distracción al volante puede ser tan peligrosa como conducir bajo los efectos del alcohol. «Es impactante ver lo que algunas personas hacen mientras manejan», comentó el sheriff del condado de Oakland, Michael Bouchard, quien ha observado conductores aplicándose maquillaje o incluso preparando comida mientras conducen.
«Cada vez que un conductor decide mirar su teléfono o distraerse, pone vidas en riesgo», dijo Jim Santilli, director ejecutivo de NTSO, en un comunicado de prensa.
La campaña coincide con el cierre del Mes Nacional de Concientización sobre la Conducción Distraída, reforzando el mensaje de que la seguridad vial es una prioridad. Además, la ley de uso de dispositivos móviles en Michigan prohíbe sostener o manipular teléfonos mientras se conduce, con multas que van desde $100 y servicio comunitario en la primera infracción, hasta $250 en reincidencias.
Las agencias participantes incluyen la Policía Estatal de Michigan, la Oficina del Sheriff del Condado de Macomb, la Oficina del Sheriff del Condado de Oakland y la policía de Auburn Hills, Chesterfield Township, Clinton Township, Shelby Township, Sterling Heights, Taylor, Troy y Utica. Con esta iniciativa, las autoridades esperan generar un cambio en el comportamiento de los conductores y reducir el número de accidentes en las carreteras del estado.