Michigan — Aunque las polillas esponjosas han sido una preocupación recurrente para los bosques de Michigan en los últimos años, las autoridades estatales informan que su presencia está disminuyendo de forma significativa. Sin embargo, expertos advierten que aún es necesario vigilar los árboles y espacios al aire libre, ya que podrían persistir focos de defoliación en algunas regiones.
Según el Departamento de Recursos Naturales de Michigan, el brote más severo de esta especie invasora se registró en 2021, cuando más de 1.3 millones de acres fueron afectados por la pérdida de follaje. Desde entonces, los números han ido en descenso: en 2024 se reportaron cerca de 169,000 acres afectados, una reducción considerable frente a años anteriores.
A pesar de esta tendencia positiva, se espera que en 2025 algunas zonas del suroeste del estado y partes dispersas de la península superior experimenten defoliación, aunque en menor escala. Además, se anticipa que los tent caterpillars —una especie nativa— podrían causar más daño que las propias polillas esponjosas este año.
Las autoridades recomiendan a los residentes inspeccionar árboles, muebles de jardín y estructuras exteriores en busca de masas de huevos, especialmente en áreas donde la población de orugas ha sido alta. Entre las medidas sugeridas están el uso de trampas de arpillera en los troncos y la eliminación manual de orugas en baldes con agua jabonosa. También se menciona el uso de pesticidas biológicos como el Btk, que es eficaz contra las orugas jóvenes y seguro para humanos y mascotas.
El monitoreo aéreo continuará cubriendo aproximadamente 20 millones de acres para detectar signos de defoliación y orientar las acciones de control. Aunque el panorama es alentador, los expertos insisten en que la vigilancia comunitaria sigue siendo clave para proteger los ecosistemas locales.
Hay más información sobre la polilla esponjosa disponible en Michigan.gov/Invasives.