De acuerdo con declaraciones de la Dra. Anne Schuchat, directora adjunta principal de los CDC y dell Dr. Peter Marks, director del Centro de Evaluación e Investigación de Productos Biológicos de la FDA.
Hasta el 12 de abril, se habían administrado más de 6,8 millones de dosis de la vacuna Johnson & Johnson (Janssen) en EE. UU. Sin embargo, CDC y la FDA están revisando los datos de seis casos notificados en EE. UU., relacionado con un grave y raro tipo de coágulo sanguíneo encontrado en individuos después de recibir la vacuna de J&J.
De acuerdo con CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades), en estos casos, se observó un tipo de coágulo de sangre llamado trombosis del seno venoso cerebral (CVST) en combinación con niveles bajos de plaquetas en sangre (trombocitopenia).
Los seis casos ocurrieron en mujeres de entre 18 y 48 años, y los síntomas se presentaron de 6 a 13 días después de la vacunación.
El tratamiento de este tipo específico de coágulo de sangre es diferente del tratamiento que normalmente se administra. Por lo general, se usa un medicamento anticoagulante llamado heparina para tratar los coágulos de sangre. En este contexto, la administración de heparina puede ser peligrosa y es necesario administrar tratamientos alternativos.
Según el comunicado de prensa CDC convocará una reunión del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) el miércoles para revisar más a fondo estos casos y evaluar su importancia potencial y adicionalmente, la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos)revisará ese análisis, ya que también investiga estos casos.
Hasta que se complete ese proceso, CDC recomienda una pausa en el uso de esta vacuna por precaución.
Esto es importante, en parte, para garantizar que la comunidad de proveedores de atención médica conozca el potencial de estos eventos adversos y pueda planificar el reconocimiento y manejo adecuados debido al tratamiento único requerido con este tipo de coágulo sanguíneo. De acuerdo con CDC, hasta el momento, estos eventos adversos parecen ser extremadamente raros.
Para CDC, la seguridad de la vacuna COVID-19 es una de las principales prioridades del gobierno federal y nos tomamos muy en serio todos los informes de problemas de salud posteriores a la vacunación COVID-19.
Las personas que hayan recibido la vacuna J&J y que presenten dolor de cabeza intenso, dolor abdominal, dolor en las piernas o dificultad para respirar dentro de las tres semanas posteriores a la vacunación deben comunicarse con su proveedor de atención médica.
Se solicita a los proveedores de atención médica que notifiquen los eventos adversos al Sistema de notificación de eventos adversos de las vacunas en https://vaers.hhs.gov/reportevent.htm ícono externo.