Washington, D.C. — El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) anunció nuevas directrices de seguridad nacional que endurecen la evaluación de solicitudes migratorias provenientes de 19 países considerados de alto riesgo. La medida se da a conocer tras el ataque armado contra dos miembros de la Guardia Nacional, ocurrido el miércoles en la capital estadounidense, y atribuido a un ciudadano afgano.
La actualización de políticas permite a los funcionarios de USCIS incorporar factores negativos específicos de cada país al revisar peticiones de inmigración, incluyendo la capacidad de los gobiernos para emitir documentos de identidad confiables. Esta acción busca fortalecer los mecanismos de control migratorio y se alinea con la Proclamación Presidencial 10949, emitida por el presidente Donald Trump, que restringe el ingreso de extranjeros considerados potenciales amenazas a la seguridad pública.
“Nuestra prioridad es garantizar que cada extranjero sea evaluado con el máximo rigor”, afirmó Joseph Edlow, director de USCIS. “La nueva guía autoriza considerar el contexto nacional de origen como un elemento clave en la toma de decisiones migratorias. La seguridad de los estadounidenses es nuestra responsabilidad principal”.
La medida también retoma criterios aplicados durante el primer año de la actual administración, cuando se suspendió el reasentamiento de refugiados afganos y se limitó el ingreso de ciudadanos de ese país. Según USCIS, la nueva política entra en vigor de forma inmediata y será aplicada tanto a solicitudes pendientes como a aquellas presentadas a partir del 27 de noviembre de 2025.
Para más detalles, los interesados pueden consultar la alerta oficial publicada por USCIS o visitar uscis.gov.




