Lansing, MI – A medida que se aproxima el inicio del año escolar en Michigan, persiste la incertidumbre sobre la continuidad del programa estatal que garantiza desayunos y almuerzos gratuitos para más de 1.4 millones de estudiantes. Esta iniciativa, que representa un ahorro anual estimado de 850 dólares por familia, fue reinstaurada en 2023 gracias al respaldo legislativo, pero su futuro depende de la aprobación del presupuesto estatal para el periodo 2025-2026, aún en discusión.
El retraso en las negociaciones presupuestarias ha generado preocupación entre los distritos escolares, que enfrentan dificultades para planificar sus operaciones y definir contrataciones de personal. Representantes del sector educativo, como Don Wotruba, director de la Asociación de Juntas Escolares de Michigan, han expresado que la falta de claridad financiera limita la capacidad de las escuelas para organizar sus programas y responder adecuadamente a las necesidades de los estudiantes.
Además del impacto directo en las familias, el programa de alimentación escolar también cumple una función estratégica en el fortalecimiento de la economía agrícola local, a través de iniciativas como “10 Cents a Meal”, que promueve el uso de productos cultivados en Michigan en los menús escolares. Sin embargo, la continuidad de este componente también está sujeta a la aprobación del presupuesto.
Ante la falta de una decisión definitiva por parte de la legislatura estatal, algunos distritos han optado por mantener temporalmente las comidas gratuitas durante el primer mes del ciclo escolar, como medida preventiva. La mayoría de las escuelas en Michigan tienen previsto iniciar clases entre finales de agosto y principios de septiembre, por lo que se espera que las autoridades estatales definan pronto el rumbo de este programa esencial para miles de estudiantes y sus familias.