Washington, D.C. – La estructura demográfica de Estados Unidos continúa transformándose. Según las últimas estimaciones publicadas por la Oficina del Censo, entre 2023 y 2024, la población de personas mayores de 65 años creció un 3.1 %, alcanzando los 61.2 millones, mientras que la cifra de menores de 18 años se redujo ligeramente en un 0.2%, situándose en 73.1 millones.
Este contraste refleja una tendencia sostenida en el envejecimiento de la población nacional. En 2004, los adultos mayores representaban apenas el 12.4% de la población; para 2024, este grupo representa ya el 18.0 %. Al mismo tiempo, el porcentaje de niños descendió del 25.0 % al 21.5%, evidenciando una brecha generacional que se reduce con rapidez.
Entre 2020 y 2024, el segmento de adultos mayores experimentó un crecimiento del 13.0%, muy por encima del 1.4% registrado entre los adultos en edad laboral (18 a 64 años). En contraste, la población infantil descendió un 1.7% en ese mismo periodo. Como resultado, la diferencia entre ambos grupos de edad se redujo de más de 20 millones a menos de 12 millones en solo cuatro años.
La jefa de la Subdivisión de Estimaciones de Población, Lauren Bowers, indicó que aunque el número de niños aún supera al de adultos mayores a nivel nacional, esa distancia se acorta a medida que la generación del baby boom se aproxima a la jubilación. “Estamos observando un número creciente de estados y condados, particularmente en zonas con menor densidad poblacional, donde los adultos mayores ya superan en número a los menores de edad”, explicó Bowers.
Con este escenario, ya son 11 los estados del país donde los mayores de 65 años han sobrepasado en cantidad a la población infantil, un cambio que plantea importantes desafíos y oportunidades en áreas como la salud pública, la planificación urbana y la protección social.