Lansing, MI — La Secretaria de Estado, Jocelyn Benson, emitió recientemente una advertencia pública a los ciudadanos de Michigan ante lo que calificó como un intento ilegal del Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) de acceder a información confidencial de millones de votantes registrados en el estado.
En un mensaje difundido por video, Benson denunció que el DOJ ha interpuesto una demanda contra Michigan y otros siete estados, exigiendo acceso irrestricto al Archivo de Votantes Calificados (QVF), una base de datos que contiene datos sensibles como números de Seguro Social, licencias de conducir y otros identificadores personales.
“Les dije que no podían tenerlo”, afirmó Benson, al referirse a la negativa de su oficina frente a la solicitud federal.
La funcionaria subrayó que ni el gobierno federal ni ninguna agencia nacional tiene autoridad para exigir este tipo de información, protegida por leyes estatales y federales. Entre ellas, destacó la Ley de Privacidad de 1974, que limita la creación de bases de datos centralizadas por parte del gobierno, y la ley electoral de Michigan, que prohíbe compartir datos identificables sin restricciones.
Hasta la fecha, 30 estados han rechazado las exigencias del DOJ. Solo Indiana y Wyoming han entregado sus registros completos, lo que ha generado preocupación entre defensores de la privacidad y expertos en seguridad electoral.
Benson reiteró su compromiso con la protección de los derechos de los votantes de Michigan:
“Aquí en Michigan, tienen mi palabra de que me opondré a esta apropiación ilegal e inconstitucional de su información privada”.




