Washington, D.C. — En una decisión que podría afectar a miles de migrantes venezolanos en Estados Unidos, la Corte Suprema ha autorizado a la administración Trump a revocar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para aproximadamente 350,000 ciudadanos venezolanos
El fallo levanta la orden de un tribunal inferior que había bloqueado la medida impulsada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, quien en febrero anunció la terminación del programa. La decisión judicial permite que los venezolanos pierdan sus permisos de trabajo y protección contra la deportación, lo que podría generar incertidumbre para muchas familias.
La jueza Ketanji Brown Jackson expresó su desacuerdo con la decisión, argumentando que la eliminación del TPS podría causar un daño significativo a los afectados. Por su parte, el gobierno de Trump defendió la medida, señalando que el programa debe alinearse con los intereses nacionales y que los tribunales no deberían intervenir en decisiones de política migratoria.
El TPS había sido extendido por la administración Biden debido a la crisis humanitaria en Venezuela, permitiendo a los beneficiarios permanecer en el país de manera legal. Sin embargo, con la nueva decisión, la situación de estos migrantes queda en manos de futuras acciones judiciales y políticas.
La decisión de la Corte Suprema solo afecta a quienes obtuvieron el TPS en 2023. A los venezolanos que se les otorgó en 2021 no se verán afectados y conservan su estatus legal y autorización de empleo.
Organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por el impacto de la medida, advirtiendo sobre posibles deportaciones masivas y la vulnerabilidad de los afectados. Mientras tanto, los abogados de los migrantes venezolanos continúan explorando opciones legales para frenar la implementación de la decisión.