Lansing, MI — En una acción conjunta que refleja creciente preocupación por la seguridad alimentaria en el país, la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, se unió a otros 23 mandatarios estatales para exigir al Congreso la preservación del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), ante una propuesta legislativa que podría reducir significativamente sus fondos.
La solicitud llega tras la aprobación en la Cámara de Representantes de un proyecto de presupuesto impulsado por legisladores republicanos, el cual contempla un recorte de 300 mil millones de dólares al SNAP. Esta reducción generaría impactos profundos en estados como Michigan, donde más de 1.4 millones de residentes dependen del programa para garantizar su alimentación.
«Este tipo de recortes obligaría a muchas familias a elegir entre lo esencial: comida, salud o vivienda», advirtió Whitmer en un comunicado. “Necesitamos trabajar para hacer la vida más asequible, no para agravar las dificultades de quienes ya enfrentan retos diarios”.
El programa SNAP, que respalda la compra de alimentos a más de 42 millones de personas en EE.UU., beneficia a una diversidad de hogares, incluidos niños, adultos mayores, personas con discapacidad y veteranos. En Michigan, casi el 15% de la población recibe estos apoyos, lo que también fortalece la economía local a través de más de 9,800 comercios minoristas que aceptan estos beneficios.
Además, los fondos federales cubren actualmente el 100% de los beneficios y la mitad de los costos administrativos. Las nuevas medidas propuestas podrían trasladar hasta un 25% de estos costos a los estados, estableciendo un precedente sin comparación en los 50 años de historia del programa.
El llamado conjunto de los gobernadores destaca no solo el impacto humanitario de los recortes, sino también las consecuencias económicas: menos empleo en sectores como la agricultura, la manufactura y la distribución, y pérdida de impulso en economías locales.
En Michigan, cifras recientes indican que el 13% de los hogares enfrenta inseguridad alimentaria, y uno de cada seis niños vive por debajo del umbral de pobreza. En este contexto, reducir el alcance de SNAP tendría consecuencias inmediatas en la vida de miles de familias.
En este enlace puede encontrar la carta completa.