La Iglesia Católica y millones de fieles en todo el mundo lamentan hoy el fallecimiento del Papa Francisco, quien murió a los 88 años en su residencia en el Vaticano. Su partida marca el cierre de un pontificado que transformó la Iglesia y deja como testimonio su autobiografía Esperanza, publicada en enero de este año.
El libro, escrito en colaboración con el editor italiano Carlo Musso, estaba originalmente destinado a ser publicado tras su muerte, según la voluntad del pontífice. Sin embargo, el Jubileo de la Esperanza, programado para 2025, motivó su lanzamiento anticipado, permitiendo que su legado espiritual y social llegara a millones de lectores en más de 80 países.
Musso describió la obra como el testamento del Papa, un relato lleno de fe, valores morales y reflexiones sociales que busca inspirar a hombres y mujeres de todo el mundo. Esperanza representa la culminación de seis años de trabajo, en los que el Papa Francisco plasmó su vida en primera persona, desde sus raíces italianas y su infancia en Buenos Aires, hasta su vocación religiosa y su pontificado.
En sus páginas, el Papa aborda temas contemporáneos y controvertidos con valentía y sinceridad, ofreciendo un relato profundamente humano y conmovedor. Además, comparte anécdotas inéditas y reflexiones que invitan a la introspección y a la esperanza, destacando su conexión con la familia, la comunidad y la fe.
Con un estilo narrativo único, Esperanza se posiciona como un legado espiritual y cultural que trasciende fronteras, consolidando al Papa Francisco como una figura histórica y universal. Este libro no solo es un testimonio de su vida, sino también un llamado a la reflexión sobre los desafíos y oportunidades de nuestra época.
