Austin, Texas — El jueves se emitió una nueva orden ejecutiva por el gobernador Greg Abbott en la cual se autoriza a las fuerzas del orden público que devuelvan a los indocumentados a la frontera.
La Guardia Nacional de Texas y el Departamento de Seguridad Pública ahora están autorizados a detener a inmigrantes indocumentados entre los puertos de entrada y devolverlos a la frontera, bajo la Orden Ejecutiva No. GA-41.
En un comunicado de prensa que anunció la nueva orden, el gobernador Abbott dijo que su nueva directiva se produce después de la reciente decisión de la Administración Biden de poner fin a las expulsiones del Título 42 y la política de permanecer en México por los «niveles históricos de cruces ilegales».
La oficina de Abbott dijo que 5.000 indocumentados fueron detenidos durante el fin de semana del 4 de julio y que hay una crisis en curso que ha «invadido comunidades» en la frontera y en todo el estado.
Puede leer aquí la orden ejecutiva completa del gobernador.
La orden del gobernador entró en vigencia de inmediato, pero las autoridades dijeron que aún se estaban resolviendo los detalles prácticos de cómo se cumpliría la deportación de los indocumentados.
Hasta julio, Texas ha gastado más de $3 mil millones en fondos para mejorar su seguridad fronteriza, pero la operación estatal no ha detenido el flujo de migrantes.
El grupo de defensa RAICES, que brinda servicios legales a familias inmigrantes y refugiados, calificó la medida de Abbott como una extralimitación de podery pidió una intervención rápida de la administración Biden, que no reaccionó de inmediato a la orden de Abbott.
El anuncio de Abbott se produce un día después de los informes de que el Departamento de Justicia de EE. UU. inició una investigación sobre presuntas violaciones de los derechos civiles en el marco de su operación fronteriza, la Operación Lone Star.
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