Detroit, Mich. – Varias comunidades del área metropolitana de Detroit han presentado una demanda federal contra las principales compañías farmacéuticas, por los elevados precios de la insulina, un medicamento esencial para millones de personas con diabetes.
La demanda, liderada por la ciudad de Detroit y los condados de Macomb, Monroe, Wayne y Washtenaw, acusan a las empresas Eli Lilly and Co., Sanofi-Aventis y Novo Nordisk de inflar artificialmente los precios de la insulina.
Según la demanda, este esquema ha provocado que el precio de la insulina se dispare un 1.500% en los últimos 20 años, lo que ha afectado gravemente a los pacientes, que a menudo tienen que elegir entre pagar el medicamento o cubrir otras necesidades básicas.
Los demandantes buscan una compensación por los daños causados por las farmacéuticas, así como una orden judicial que les obligue a bajar el precio de la insulina y a cesar sus prácticas ilegales. También quieren que se devuelva el dinero que se ha pagado de más por el medicamento a los afectados.
Los representantes legales de las comunidades demandantes han comparado este caso con el de la crisis de los opioides, en el que se lograron importantes acuerdos con las empresas responsables. Asimismo, han expresado su esperanza de que esta demanda ayude a mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes y a garantizar su acceso a un tratamiento asequible.
Las compañías farmacéuticas demandadas han negado las acusaciones y han afirmado que sus precios están basados en los costos de producción e investigación. También han señalado que han ofrecido programas de asistencia y descuentos a los pacientes que lo necesitan.
La diabetes es una enfermedad crónica que afecta a casi el 12% de la población estadounidense, según un estudio nacional realizado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en 2022.
