Se acerca el fin del horario de verano de 2022, lo que quiere decir que los relojes de Estados Unidos se retrasarán una hora señalando el comienzo de las noches oscuras del invierno.
El horario de verano comienza el segundo domingo de marzo y termina oficialmente el primer domingo de noviembre, es decir el próximo 6 de noviembre, cuando el horario cambie de las 2 a. m. a la 1 a. m.
Luego volverá hasta el domingo 12 de marzo de 2023.
¿Cuál es el propósito del horario de verano?
La práctica de adelantar los relojes una hora en la primavera durante el clima más cálido y atrasarlo una hora en el otoño cuando hace más frío se conoce como horario de verano (DST, por sus siglas en inglés).
Su propósito es que se pueda hacer un mejor uso de la luz natural. El sol saldrá y se pondrá una hora antes una vez que finalice el horario de verano, lo que significa que habrá más luz solar durante el día.
¿Cómo prepararse para el horario de verano?
Puede comenzar a hacer cambios la semana antes del final del horario de verano:
- Reciba la mayor cantidad de luz posible todos los días. Esto puede ayudar a ajustar el ritmo de su cuerpo para el cambio que se avecina.
- Comience a relajarse un poco más temprano en las próximas noches. Entrar en el cambio de horario bien descansado puede ayudar.
- No duerma la siesta. Agregar una siesta durante la tarde puede hacer que sea aún más difícil dormir bien esa noche.
- No lo compense con cafeína extra. Puede parecer que uno o dos cafés extra pueden ayudarlo a superar la depresión del mediodía, pero demasiada cafeína no es saludable para el corazón.
- Si no puede dormir la hora extra, o desea una transición más suave, intente cambiar su hora de acostarse 30 minutos más tarde con unos días de anticipación, de modo que para el domingo, la hora en el reloj esté más cerca de la hora en que su cuerpo lo siente, dijo Jennifer Martin, profesora de medicina en la Universidad de California, Los Ángeles, y presidenta de la junta directiva de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño, según señaló The New York Times.
Por otro lado, los defensores de la seguridad y los funcionarios públicos recomiendan que los residentes cambien las baterías de sus monitores de humo y monóxido de carbono dos veces al año cuando comienza y finaliza el horario de verano para asegurarse de que funcionen correctamente.
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