Wayne, MI — Lo que pudo haber sido una tragedia masiva fue contenido gracias a la rápida acción de los miembros de una iglesia local, quienes enfrentaron a un hombre armado que irrumpió durante un servicio religioso el domingo por la mañana.
El incidente ocurrió en la iglesia CrossPointe Community Church, donde unas 150 personas, incluidos numerosos niños, participaban en una actividad especial de escuela bíblica. Según las autoridades, un hombre identificado como Brian Browning, de 31 años y residente de Romulus, llegó al lugar conduciendo de forma errática. Vestía un chaleco táctico y portaba un rifle tipo AR-15, una pistola con cargador extendido y múltiples cargadores adicionales.
Testigos relataron que Browning comenzó a disparar en el estacionamiento. En un acto de valentía, un feligrés lo embistió con su camioneta, lo que permitió que el equipo de seguridad de la iglesia —compuesto por miembros de la congregación— respondiera al ataque. Se produjo un intercambio de disparos en el que Browning fue abatido. Un guardia de seguridad resultó herido en la pierna, pero se encuentra fuera de peligro.
Según informes se confirmó que el atacante había asistido a la iglesia en ocasiones anteriores y que su madre es miembro activo de la congregación. La policía que ejecutaba una orden de allanamiento en la casa de Browning en Romulus dijo que hallaron más armas y municiones en la casa, aunque no se han encontrado vínculos con grupos extremistas ni antecedentes penales. Las autoridades investigan si el agresor atravesaba una crisis de salud mental.
El jefe de policía de Wayne, Ryan Strong, elogió la preparación del personal de la iglesia: “La respuesta rápida y decidida de los feligreses evitó una tragedia mayor. Su entrenamiento salvó vidas”.