La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha aprobado el primer monitor de glucosa en sangre que se puede comprar sin receta médica. Se trata de Stelo, un dispositivo que se adhiere a la parte posterior del brazo y que envía las mediciones de glucosa al teléfono inteligente del usuario.
El sistema biosensor de glucosa Dexcom Stelo, está dirigido a las personas con diabetes tipo 2 que no usan insulina, que son unos 25 millones de adultos en Estados Unidos. Estas personas pueden controlar su diabetes con medicamentos orales, inyectables o con cambios en su dieta y actividad física. Stelo les permite conocer su nivel de glucosa en todo momento y ver cómo se ve afectado por lo que comen y hacen.
El monitor de glucosa funciona con un pequeño sensor que se cambia cada 15 días y que mide la glucosa cada 15 minutos. Los datos se transmiten a una aplicación en el teléfono inteligente, que muestra las tendencias y alerta de posibles problemas. Sin embargo, Stelo no es adecuado para las personas que sufren de hipoglucemia, es decir, niveles bajos de glucosa, ya que no les avisa de esta condición que puede ser grave.
La FDA ha basado su aprobación en un estudio clínico que demostró que Stelo era seguro y eficaz. Los efectos secundarios más comunes fueron infecciones locales, irritación de la piel y molestias en el lugar donde se coloca el sensor. Estos efectos pueden ser más frecuentes en las personas con diabetes, que tienen más riesgo de infección. Por eso, se recomienda vigilar el estado de la piel y consultar al médico si hay signos de inflamación o dolor.
Stelo estará disponible en línea a partir de este verano, según ha anunciado Dexcom, la empresa que lo fabrica. El precio aún no se ha revelado, pero se espera que sea más asequible que otros monitores de glucosa que requieren receta. Stelo también se podrá usar por personas sin diabetes que quieran conocer mejor el impacto de su alimentación y ejercicio en su nivel de glucosa.